La mansión y el estanque

Para empezar, no tolero ninguna acción que no me comprometa directamente mientras trabajo aquí en la Agencia. Mis compañeros, superiores y compañeros de estudios son responsables de lo que hacen. No es que todavía no me sienta mal. Hay muchos daños colaterales que vienen con este trabajo.

Mi nombre es Isabella. Isabella Davis. Soy un operador especial, capacitado durante seis años y estoy en el campo más de lo que me corresponde. Una vez que mi esposo fue brutalmente asesinado, no vi ningún sentido en seguir tratando de llevar una vida normal. Estaba bien ... bueno, mal. Demasiado diferente sin él.

Pero mi agencia no se ocupa de sus amenazas promedio. No, para nada. Nos ocupamos de las cosas que se mueven de noche, las criaturas del mismísimo infierno. Cosas que ve en su dormitorio durante la parálisis del sueño o cuando camina solo a medianoche.

Me va bastante bien con una pistola y mis puños. Lo que me falta en fuerza, lo pongo al día en estrategia. Haz lo que quieras con esto, pero esto es lo que necesitas saber. Hay mucha más información clasificada que podría publicar, pero prefiero no hacerlo. Ya estoy arriesgando mi vida al decirte lo siguiente, no es necesario aumentar la apuesta cuando no es necesario.

Estoy destinado en el Sitio 12, una de nuestras instalaciones. Y hoy habíamos traído un testigo. Un testigo que había visto lo que estaba sucediendo en lo que pronto se convertiría en nuestro lugar de misión esa noche.

Entré en una de las salas de interrogatorios, estaba más blanca que la nieve y esterilizada hasta el infierno. Como casi todas las habitaciones de esta propiedad. Especialmente los laboratorios.

El propio testigo era un hombre joven, probablemente no mayor de veinte años, con el pelo largo, un aspecto bastante descuidado y la ropa cubierta de tierra y escombros del bosque. Pero eran colores extrañamente brillantes, vi un conjunto bastante variado de ellos, pero no había, sin embargo, una sola prenda negra o gris en él.

El director de operaciones Ted Bowser estaba allí, junto con el doctor West. El jefe de la División de Ciencias aquí y probablemente el más autorizado junto a Ted. Constantemente iban y venían sobre quién tiene jurisdicción sobre qué, se convirtió en un verdadero dolor de cabeza, pero aprendí a evitarlo.

“¡Eran como esos monstruos arbóreos! Intenté entrar a la mansión pero me atacaron y corrí como un loco, apenas salí. Continúa el testigo. Mirándome mientras tomo mi lugar detrás del Doctor West. Fue sutil, pero casi pude ver algo de picardía detrás. A pesar de sus quejas y de la ropa sucia, todavía se veía ileso, sin cortes, magulladuras o laceraciones de ningún tipo.

"¿Qué estabas haciendo cerca de la mansión cuando empezaste, idiota?" Grills Ted, provocando una respuesta con los ojos muy abiertos del testigo.

"Yo estaba uh ... invadiendo. Soy un explorador urbano. El testigo responde en un tono bastante derrotado.

"Parece que obtuviste lo que merecías para ser un idiota". El Doctor West está haciendo un seguimiento. "La próxima vez use su cerebro, no sus adictos a la adrenalina".

"¡Solo estaba tratando de divertirme!" No es como si estuviera lastimando a nadie. "

Sigo sin decir nada, mi estómago empieza a retorcerse porque sé lo que pasará pronto. Gracias a Dios no tuve que hacerlo. Incluso con todo lo que he hecho a lo largo de los años, no tenía el corazón frío al respecto.

El testigo continúa describiendo a las criaturas con más detalle, haciendo sonreír a Ted y West, sin gratitud. No, era una siniestra sonrisa de engaño la que se veía en el rostro de un asesino en serie justo antes de su inminente muerte.

"Bueno, creo que eso es todo lo que necesitamos escuchar". Anuncia la doctora West, cerrando un archivador lleno hasta el borde de papeles mientras se pone de pie.

Luego, Ted le indicó al oficial que estaba al otro lado de la habitación que se adelantara. De pie detrás del testigo que todavía estaba sentado en la silla, sin darse cuenta de lo que sucedía detrás de él.

Luego, el agente recupera una pistola de la parte delantera de su cinturón. Ponlo detrás de la cabeza del testigo, luego dispara. Explota sus sesos y hazlo caer hacia adelante en la silla mientras la sangre fluye por el agujero de bala en su frente.

West, por supuesto, no se molesta, sale de la habitación. Ni siquiera se dio la vuelta para decir.

"Asegúrese de que el equipo de limpieza venga aquí antes de que se seque la sangre".

Era un procedimiento estándar, en cuanto a por qué no podíamos encontrar otro método ... No sé por qué. Pero definitivamente no estoy de acuerdo con eso. Pero alguien con mi nivel de permiso tratando de dar órdenes no terminaría bien. No hay lugar para preguntas aquí, no importa quién sea usted.

Después de que West sale de la habitación, algunos tipos con camisetas grises y jeans entran para recuperar el cuerpo. Dos de ellos lo sacan y los demás traen baldes de lejía y otros químicos para comenzar la limpieza.

Ted se acerca, ajustándose la corbata del traje casualmente antes de asentirnos a mí y al otro agente.

“Voy a enviar un equipo a esta mansión esta noche. Quiero que ambos estén ahí. Así que deberías hacer un viaje a la sala de armas y equiparlos a los dos. Estará fuera por unas horas después de que encuentre a otros cuatro agentes que se unan a usted. Asegúrese de llevar consigo los escáneres acuáticos. "

Ted luego retrocede un poco, a unos centímetros de la puerta antes de que el agente hable. Su voz ronca con un débil áspero. Como si fuera un fumador de cigarrillos veterano.

"¿Traemos 16A con nosotros?"

“No, no será necesario para esta operación, tienes el equipo para acometer esta operación. No te engañes y mueras porque no seré yo quien invente mentiras complicadas escribiendo a tus familias, estoy cansado de hacer eso y enviar refuerzos todo el tiempo. "

Ted luego sopla con apatía y camina, dejando solo al agente, el equipo de limpieza y yo salimos de allí. En general, mato todo el tiempo. Monstruos, criaturas maliciosas e incluso humanos desdeñosos. Pero nunca antes había matado a personas inocentes, así que siempre me golpea cada vez que lo veo. Pero como dije, no tengo poder para cambiarlo.

Así que me dirigí a la sala de armas, agarré unas gafas de visión nocturna, un rifle de asalto con cargadores redondos perforantes, un visor con zoom para dicho rifle y un pequeño lanzallamas también. Uno en el que no tenga que llevar un tanque enorme en la espalda para combustible.

Todo estaba en la propia jarra. Aunque este modelo en particular aún se encuentra en la etapa de prototipo. La armadura corporal y el equipo de protección ya eran obligatorios en estas misiones, por lo que me los entregarían de todos modos.

Solo por si acaso, metí algunas granadas y un Ecto-Magnet en el cinturón de mi arma. Satisfecho con la rapidez con que me armé, me dirigí a la sala de reuniones y me senté en uno de los basureros de información bastante innecesarios que tenía varias veces antes. Tan extraño como suena.

Después de terminar con la intensa sesión informativa, comenzamos a cargar al equipo de seis hombres en el camión de transporte. Estaba bien, de hecho disfruté el viaje, aparte de uno de los agentes masculinos que intentaba golpearme, por supuesto. Pero no estuvo tan mal. Traté de no hacer muchas cosas que no importaban a largo plazo.

"Así que vamos a ir tras la gente de los árboles ahora, ¿eh?" El agente más alejado de las puertas pregunta retóricamente mientras el camión recibe una ligera paliza, lo que indica que el camino actual en el que estábamos estaba lleno de baches. Luego enciende un cigarrillo y lo fuma mientras mira al suelo.

"No puedo creer que el director esté perdiendo el tiempo con tonterías como esta, no me uní a disparar algunas agujas de pino en movimiento". Nosotros respondemos. Escupir en el piso del camión.

"¿De verdad quieres un trabajo más difícil?" Estoy hablando de una manera un poco burlona. "¿Deberíamos enfrentarnos a Drácula y sus secuaces en su lugar?"

El oficial que enciende el cigarrillo gira lentamente la cabeza. Sin ocultar su irritación por mis divertidas encuestas.

"¿Quién te pidió que hablaras Bella?" Rie. "Porque no lo recuerdo".

"Mira esto." Le respondo con un ladrido. "Solo estaba tratando de levantar el ánimo, no hay necesidad de ser un idiota".

"¡Oye!" Quien esté más cerca de las puertas del remolque grita, se pone de pie y nos mira como si fuéramos niños actuando en la casa de otra persona. "Ya casi llegamos, así que todos se ponen sus pantalones de niño grande y dejan de comportarse como un montón de pensamientos".

El que quería ser el papá de todos era Dave, Dave suele ser el que está a cargo de estas misiones porque fue el que sobrevivió a más experiencias que todos nosotros juntos. Y admiré su destreza combativa, pero nunca salí con él personalmente.

Pero después de un poco más de conversación y camaradería verbal, el camión se detuvo. No más golpes ni torceduras. Indicando que hemos llegado.

"Muy bien, todos llaman al gerente por radio y le dicen que estamos aquí". Membresía obligatoria. "

Tomo mi radio presionando el botón del costado.

"La Agente Bella señala su presencia."

Los demás hacen lo mismo, lo que luego nos lleva a salir del camión y caminar hacia la mansión.

Era un bosque de pinos, mi tipo favorito. Tenía una extraña obsesión con ellos cuando era pequeña. Pero había algo extraño en este, en particular, algo extraño.

El silencio era extraño, pero era común. Si este fue el trabajo de los críptidos, entonces probablemente no había mucha gente en el área inicialmente. Hizo nuestro trabajo mucho más fácil.

La mansión en sí no era realmente tan profunda en el bosque, solo a media milla de distancia. Pero aún lo suficientemente lejos de otras estructuras para estar decentemente aislado. Sin el conocimiento de los conductores en la carretera, al menos eso es lo que nos dijeron.

Enfoco mi atención frente a mí, hay lo que solo puedo describir como un gran estanque, pero era más un pequeño lago. Un estanque turbulento entre nosotros y la mansión. Solo lo cruza un puente delgado, lo que significa que tendremos que caminar una sola línea de archivo a juzgar por el ancho.

Algunos de los pinos habían caído al agua, la mitad de la longitud de su tronco sobresalía de la superficie mientras que la otra mitad estaba sumergida.

Pero no fue porque el agua fuera poco profunda cerca. Por lo que he visto de todos modos. Además, el terreno a los lados del estanque era puntiagudo, con muchas rocas afiladas que sobresalían del suelo. Por lo tanto, la idea de circular estaba descartada. No sin algún tipo de vehículo aéreo, que actualmente no tenemos.

"Apaga los vasos", nos ordena Dave al resto de nosotros. "Las luces están encendidas dentro de la mansión, no quiero estropear tus ojos".

"Realmente siento que deberían habernos dado un helicóptero para este", interviene Lenard. Lenard, quien a menudo era el miembro más amigable de estos equipos, siempre hacía todo lo posible para animar a todos a pesar de las circunstancias.

"No." Llegó la refutación de Dave. “No desperdician todo ese combustible solo para que podamos cruzar un maldito estanque”.

Tenía razón en ambos. mirando la mansión las luces estaban encendidas adentro. A pesar del hecho, se suponía que nadie había vivido allí durante más de una década. La mansión en sí era preciosa, un acabado de ladrillo liso con un elegante techo de piedra negra. Tenía que ser seis veces el tamaño de su casa de clase media a media. Pero eso fue solo el exterior.

Pero todo a su alrededor gritaba mal, los pinos más cercanos a la estructura no tenían agujas. Estaban simplemente desnudos. Lo cual era completamente antinatural. Una vez más, lo natural no es nuestro trabajo.

Ah, y hablando del pequeño lago, no eran solo pinos medio sumergidos los que habían caído al agua, sino que vi algunas tarimas de madera flotantes y otros artículos. Hierba, malezas, etc. La superficie en sí estaba en calma, ni una sola ola se movía. Pero estaba demasiado silencioso.

“Solo unos pocos deberían ir al principio solo para probarlo”, sugerí. "El puente parece bastante inestable".

"Es la mejor idea que he escuchado en todo el día", felicita Dave, volviéndose para saludar al resto del equipo. "Todos han escuchado a la dama, ¿no es así?

Todos los otros agentes asienten después de mirar a Dave.

"Uh señor, ¿tenemos alguna idea de la profundidad de este estanque?" Pregunta el agente a mi izquierda. "Porque estoy mirando mi Escáner Acuático y no funciona correctamente". Informa, con la muñeca apuntando a la superficie del agua mientras mira hacia abajo.

Cada uno de nosotros retrocede. Los escáneres acuáticos fueron dispositivos inventados por un equipo de nuestros científicos más talentosos. El doctor West es uno de ellos. Fueron diseñados para poder calcular instantáneamente la profundidad de cualquier cuerpo de agua hasta cuarenta mil pies. Que es más profundo que cualquier parte conocida del océano. Entonces puedes imaginar lo que eso implica.

"Es imposible." Dijo Lenard. El agente más retrasado. "¿Cómo puede un estanque ser más profundo que la Fosa de las Marianas?"

“Literalmente matamos a los demonios que escupen fuego que desgarran la piel de las personas, es extraño pero no sorprendente”, agrega Dave.

"El 16A lo mató, no tú", comenta Lenard con sarcasmo, para consternación de Dave.

"Sí, sí, sí, lo que sea". Dave gime. Agitando a Lenard con la derecha.

El estanque continuó sentado en silencio frente a todos nosotros. El agua verde y turbia hace que parezca que pertenece más a un pantano que en medio de un pinar.

"Muy bien, tres en cubierta a la vez." Lenard, Bella y yo vamos a empezar. Dave dijo con bastante severidad, sin provocar ningún argumento de nadie.

Apago la seguridad de mi rifle. Sacando mi propio escáner acuático para asegurarme de que el fenómeno era cierto, y me dio el mismo resultado que el otro agente. El agua era demasiado profunda para poder calcularla. Quizás incluso interminablemente. En cuanto a cómo funcionaba la física, estaba completamente perdido.

Subimos al puente final, Dave al frente, Lenard en el medio y yo atrás. Los tablones en sí parecen sueltos, podridos y amenazan con derrumbarse bajo nuestros pies. Tuvimos suerte de haber decidido no ir todos al mismo tiempo considerando que el puente se balanceaba entre nosotros tres.

"¡Parece que la costa está despejada por ahora!" Dave está gritando. "Pero no te sientas muy cómodo". Fue un poco desagradable de mi parte considerando que no quería que hiciera demasiado ruido y llamara la atención de lo que fuera que hubiera en el agua debajo.

Estoy seguro de que no, porque algo creó una onda en el agua turbia. El primer movimiento que había visto desde que llegué. Lo que provocó que las tablas que flotaban en el agua se estrellaran contra el puente.

Los agentes de Retorno a la Tierra apuntan con sus armas al agua. Mantenga los barriles formados en la superficie en caso de que algo salga desde abajo. Estaba inquieto, sintiendo que mi agarre apretaba el gatillo. Tal anticipación era demasiado común en estas misiones.

Estábamos a mitad de camino cuando se produjo otra ondulación, esta vez en la mitad izquierda del agua. Enviar dos tablas flotantes que se estrellan contra el puente.

"Realmente hay algo ahí, ¿crees que es Cthulhu?" Lenard bromea, tratando de levantar el ánimo.

Aprecio esto porque realmente fue el alivio cómico que necesitaba. Especialmente cuando aparece una tercera onda. Pero este fue mucho más notable que los dos primeros, convirtiéndose más en una salpicadura y formando espuma en una parte significativa del agua.

"Sólo sigue adelante, cuanto más nos acerquemos al otro lado, mejor". Dave asiente, agitando su mano hacia Lenard y hacia mí.

Después de unos minutos más de caminar con cuidado, finalmente llegamos al otro lado ilesos de cualquier cosa que se escondiera en el enorme estanque de abajo. Los tres nos volvemos hacia los oficiales en el extremo opuesto del puente.

En lugar de gritar y alertar a la criatura que estaba en el agua. Dave usa su radio para comunicarse con los otros agentes. Dígales que no se caigan hasta que descubramos a qué nos enfrentamos.

"¿Qué? No, no deberíamos perder el tiempo. Probablemente es solo un gran caimán o algo así."

Siempre debe haber este tipo, el terco, desobediente por pura arrogancia y comenzando a cruzar el puente. Pero se dio la vuelta rápidamente cuando uno de los pinos medio sumergidos fue tirado repentinamente por debajo de la superficie por completo. Como si algo lo hubiera agarrado y derribado con todas sus fuerzas, como una advertencia de algún tipo.

"Está bien ... estoy empezando a pensar que el comentario de Cthulhu no fue tan inexacto." Dave dijo golpeando a Lenard en el hombro.

"Tienes una forma extraña de bromear sobre esto", le digo con una cara seria, todavía mirando por mi alcance mientras escaneo la superficie del estanque. Sé que sé que sonó desdeñoso a primera vista, pero en el fondo lo encontré divertido.

"Tenemos que dibujarlo". Lenard propone. Luego aprieta el gatillo de su rifle y dispara algunos tiros a la superficie del agua. Causando un patrón rápido de pequeñas salpicaduras cuando las balas golpean la superficie.

Su idea funciona, unos segundos más tarde se levantan burbujas que brotan sobre el agua. Indicando que algo estaba pasando, algo grande. Considerando cuántas burbujas había en realidad. También parecían bastante grandes individualmente.

Todos prepararon sus armas, colocándose en la posición correcta mientras nos quedamos tan quietos como estatuas mientras nos enfocamos en la posible ubicación del objetivo.

De nuevo, silencio durante varios segundos seguidos. Sin burbujas, sin ondas y sin salpicaduras. No podía decir si esta entidad estaba tratando de engañarnos o no, pero definitivamente sonaba inteligente. Tratando de hacernos creer que haría una cosa mientras que haría otra.

Luego, sin previo aviso. La misteriosa bestia explota desde debajo de la superficie y cerca de donde Lenard, Dave y yo estábamos parados. Cada uno de nosotros abre fuego inmediatamente, pero el problema es. Solo es visible durante unos breves y rápidos segundos. Desapareciendo tan rápido como apareció.

"¡Oh Dios mio!" Lenard prácticamente grita como una colegiala, señalando algo detrás de mí.

Dudo mientras me doy la vuelta, ya por miedo a lo que podría haber estado allí. Pero en este caso, eso era lo que no estaba allí.

Dave se había ido, la mitad superior de su cuerpo completamente desgarrada de las caderas hacia arriba. Su estómago, brazos, piernas, cuello y cabeza han desaparecido. Sangre fluyendo y brotando de su mitad restante. Los tendones, músculos y una variedad de tejidos se amontonan en un lío de color escarlata justo al lado del agua.

"¡Jesús!" Me muevo hacia atrás. Manténgase alejado del agua para evitar sufrir el mismo destino que Dave. Toda su carrera, todas esas misiones, todo ese entrenamiento, todos esos monstruos asesinados, todo estalló casi instantáneamente. Justo frente a nuestros ojos.

No lo hice bien, solo sé que le di todo lo que tenía durante los pocos segundos que estuvo fuera de sus elementos. Pero por lo que entendí, la criatura era al menos de un color púrpura oscuro, y recuerdo haber visto muchos picos de color blanco también, pero estaba en casi todo.

"Este es el equipo X4". Lenard entra por radio. “El agente Dave ha fallecido. Repito, Dave está muerto. Solicita más pedidos. "

La voz de Ted cruza la radio segundos después de que Lenard soltó el botón. Realmente no podía decir si estaba un poco enojado o simplemente se alejó del tono elegido que usó esta vez. Siempre es difícil decirlo con él.

"Sigan moviéndose, por eso les envié a seis de ustedes. No sean un montón de cobardes a la vez, acaban de acabar con un montón de Wendigos la semana pasada, ¿recuerdan? No debería ser un problema. Ted responde con bastante apatía, sin siquiera preguntar cómo es que Dave está muerto.

Antes de que pueda agregar mi propio comentario a la respuesta de Ted. De repente escucho que algo sube a la superficie del agua, en el mismo lugar donde supuestamente habían arrastrado a Dave. Todavía agua espumosa en el espacio considerable. Probablemente a unos pocos metros cuadrados de solo mirar a simple vista.

Eran ... los huesos de Dave, flotaban. Los de su caja torácica a su cráneo de todos modos. Habían sido despojados de toda su carne y músculos en lo que fue solo un minuto. Pero, por supuesto, los huesos no flotan. Son más densos que el agua, por lo que no deberíamos haber podido verlos en primer lugar.

"¿Qué diablos? ¿Por qué ese agua actúa como si fuera ácida o algo así?", Pregunta Lenard antes de agarrar un palo cercano con una longitud decente. Sostenga un extremo con ambas manos y ponga lentamente el otro extremo en el agua para probar si lo que pensaba era cierto.

El palo rompe la superficie, no vemos ningún burbujeo ni movimiento artificial. Al menos no al principio. El palo parece estar bien, todo intacto debido a la pequeña cantidad que pude ver bajo el agua. Aproximadamente unos centímetros.

Nuestras gafas de visión nocturna no estaban equipadas para uso bajo el agua, no las versiones que usamos actualmente de todos modos. Así que no teníamos muchas opciones para ver mejor a la criatura mientras estaba allí. Tendremos que esperar hasta que reaparezca antes de poder matarla.

Este enorme estanque era un abismo, un abismo que me miraba fijamente mientras lo miraba. Podía sentir el líquido turbio perforando mis ojos y entrando en mi alma mientras lo miraba. Fue casi un trance.

Este resultó ser el peor momento para verlo mientras la criatura que mató a Dave resurgió sobre la superficie. Esta vez por un período más largo, lo que me permitió ver bien los detalles de su apariencia cuando abrimos fuego contra él.

Era larga, debió medir más de diez metros de largo por su cuenta por lo que pude estimar. Probablemente también de unos dos metros de ancho. Su piel era de un violeta violeta africano oscuro. Su espalda, o lo que supuse que era su espalda de todos modos, estaba absolutamente cubierta con esos picos de un pie y medio. Un tono claro, blanco como la nieve al final de cada uno.

Sus dientes tenían la forma de un cortador de pizza, de un color amarillo brillante para ellos. La mayoría de ellos estaban manchados de sangre, la sangre de la cual obviamente era Dave. Todo colocado en una boca que parecía poder tragarse un sedán entero.

Conté ocho ojos que estaban justo encima de su boca. Todo completamente blanco, sin pupilas ni iris. Nuestras balas funcionaron cuando disparamos a la criatura, su sangre tenía el mismo tono de púrpura que su carne. Pero hizo lo inteligente, sumergirse de nuevo en el agua después de recibir suficiente daño.

Pero justo después de que desapareció en las profundidades, no hubo señales de sangre o heridas. Podría haber jurado que saqué una de sus púas en la espalda. Una parte de mí pensaba que esta extraña agua tenía propiedades curativas y que sumergir la herida la curaba. En cuanto a si esto funcionaría o no en humanos, era discutible. Pero considerando lo que le pasó a Dave, tendré que decir que no.

El escenario más probable es que el agua solo posea propiedades curativas para la criatura que vivía en ella. Quiero decir, parecía un carnívoro, así que tenía sentido.

Por ahora, seguro que tendremos que buscar otra solución, porque si todo esto fuera cierto. Básicamente, esto significaba que estábamos desperdiciando nuestra munición disparando a esta criatura en primer lugar.

"¡Cómo se supone que vamos a matar a esta cosa!" Los oficiales gritan a través del puente a lo que respondo con una mirada aburrida para hacerlo en lugar de solo usar sus radios.

De repente recordé que había traído granadas. Me vuelvo hacia Lenard, que todavía miraba el estanque con una expresión hipnotizada en el rostro. Aunque no le culpé.

Pero luego muevo mis ojos hacia el extremo este del estanque. La parte más alejada de nosotros. Un chapoteo gigantesco me llamó la atención al igual que a mis compañeros agentes. Naturalmente, cambiamos nuestra atención a este lado del charco.

El pino que había sido arrancado y previamente arrancado bajo el agua salió del estanque a una velocidad ridícula, volando alto en el aire antes de caer y aterrizar sobre las rocas puntiagudas y empalado en su tronco.

Veo un área en el agua dando vueltas y comenzando a moverse hacia el lado oeste del estanque. La criatura ahora nadaba cerca de la superficie, pero lo suficientemente profundo como para mantenerse directamente fuera de la vista.

La ola se detiene abruptamente, lo que indica que la criatura se ha hundido más. Eso es lo que pensamos de todos modos. Hasta que una voz retumbante salió del estanque. Aparentemente procedente de cada centímetro de la superficie.

"¡Sal de mi casa!" Hace una reverencia, sacudiendo el suelo con su único bajo. No era solo ira, era rabia. Rabia pura y desenfrenada. Pero no fue una crueldad fría, sonó casi emocional, angustia, angustia por así decirlo.

"¿Puedes hablar?" Digo tratando de calmar a la criatura. "¿Por qué mataste a nuestro amigo? ¿Quieres que todos estemos muertos?

"¡Ustedes son esos humanos, los que mataron y esclavizaron a mi madre!" Trona, una vez más todos casi caemos ondas sonoras que atraviesan la propia tierra. "Tuve que matarla sin otra opción. Su mente había sido retorcida más allá del reconocimiento.

Je m'arrêtai, n'ayant aucun souvenir d'être ici ou d'avoir tué une créature qui ressemblait à la limace aquatique violette. Ce qui m'incite à ranger ma grenade.

J'ai demandé aux autres, ils étaient également ignorants. Alors j'ai téléphoné à Ted, décrivant la créature aussi détaillée que possible. Il a parcouru les dossiers, bien sûr en s'assurant de me traiter d'idiot avant de me dire que nous n'avions aucun enregistrement de l'extermination d'une créature comme celle-là.

«Nous n'avons ni asservi ni tué votre mère!» Je crie en retour. "Qu'est-ce que tu essayes de dire?"

Il y a un court chapitre de silence avant que la créature ne réponde, se cachant toujours sous l'eau.

«Vous portez leur couleur, le noir. Je veux celui aux cheveux longs!

Bien sûr, nous n’avons tous aucune idée de ce dont il parle. Des regards confus se répandent comme de l'alcool entre les cinq autres.

Cette créature ne semblait défendre que sa maison, ce qui me concernait personnellement. Non pas que je n’ai toujours pas été légèrement secoué par une exécution aussi soudaine et horrible. Mais je sais que faire cela pourrait éviter d'autres effusions de sang inutiles.

«Pourquoi parlons-nous même de cette chose!» Un agent hurle de l'autre côté du pont. «Nous devons le faire exploser!» Il a hurlé avant de récupérer un lance-grenades attaché à son dos.

"Non non, attendez!" Je crie en retour, lui tendant la main pour qu'il cesse son activité. Mais quels que soient mes ordres, il le garda pointé vers l'eau sans tirer.

«L'homme qui a tué et réduit votre mère en esclavage, avait-il un nom? Vous en souvenez-vous?

Encore une fois, quelques secondes de silence complet s'écoulent avant que quelques dizaines de bulles surgissent à la surface de l'eau.

«Ubel.» La bête prononce, sa voix plus douce qu'avant.

Ubel, un nom que je n’avais jamais reconnu ni entendu auparavant. Mais ça sonnait allemand, c'était à peu près l'étendue de mes connaissances.

«Pouvez-vous vous montrer?» Je questionne. «Encore une fois en surface?»

La créature ne répond pas verbalement, au lieu de cela, les bulles ne font qu'augmenter en taille et en nombre, je recule de quelques pas, en attendant la grande et inévitable éclaboussure qui viendrait avec sa troisième émergence.

L'agent qui avait tiré le lance-grenades l'a préparé. Sans tenir compte de ma tentative de le faire démissionner.

"Non!" Je grogne. "Arrêter!"

Je vois le contour de la limace à quelques centimètres sous l’eau vers la partie médiane de l’étang. Mais l’agent n’a toujours pas abaissé le lanceur car la limace n’était qu'à quelques millimètres de franchir la surface.

J'ai donc fait la seule chose à laquelle je pouvais penser et tirer sur l'agent juste à côté du pied. Il est bien sûr surpris, laissant tomber son lance-grenades sur le sol et le laissant rouler dans l’étang, il coule immédiatement comme s’il s’agissait d’un rocher. Une fois de plus, la physique de ce plan d'eau n'avait aucun sens.

Les cris de colère des autres agents contre moi sont interrompus après que la créature se montre à nouveau, cette fois maintenant plus calme et ne bouge plus du tout.

"Maintenez votre feu!" Je le dis à tout le monde. "Accroche toi juste!"

La limace se tourne vers moi, provoquant la création d'une petite vague. Ce qui était normal avec quelque chose de sa taille.

«Ma gratitude est incommensurable.» Il dit. «Alors tu n'es pas avec Ubel, oui?»

"Non. Nous ne le sommes pas, pouvez-vous nous dire exactement ce qu'il a fait? » Je demande, en essayant d'être un peu poli. Etrange je sais, mais d'autant plus nécessaire quand même.

«Je n’ai jamais vraiment détesté tous les humains, pendant des siècles, ma mère et moi les avons laissés traverser ce pont sains et saufs. Ils nous adoraient, nous voyaient comme des dieux. Il y avait des cas où ils nous apportaient de la nourriture, mais tout a changé quand Ubel et les autres qui portaient du noir sont arrivés.

«Attendez, cette maison existe depuis des siècles?» Demande Lenard stupéfait. «Les lumières à l'intérieur me paraissaient assez modernes.»

«Chut!» Je siffle.

«Ils l'ont conduite à la surface de l'étang sans fond comme pour lui offrir de la nourriture. Mais alors une bête à quatre pattes, un loup comme vous l'appelez les humains, la bête a obéi sans réfléchir à Ubel, a attaqué et tiré ma mère de l'étang, la tuant avant qu'elle ne puisse être guérie. Mais elle a subi un sort bien pire peu de temps après, ils l'ont ramenée et l'ont retournée contre moi, ont déformé son esprit jusqu'à ce que je sois obligée de la tuer une fois pour toutes. Ubel a dit que j'allais connaître le même sort assez tôt.

«Où sont cet Ubel et son peuple? Ceux en noir?

«Ils résident dans le manoir, a proclamé Ubel que j'avais trente jours pour accepter son offre. Je m'excuse pour la mort de votre compagnon humain, je pensais que vous étiez tous eux, que vous étiez revenu pour m'assurer que je subissais mon triste sort. Parce que vous portez la couleur noire.

"Non! Non! Non!" Un agent me radios, essayant d'être subtil. Mais je suis sûr que la créature l’a quand même entendu. «Pourquoi essayons-nous même de parler de cette chose? Ne voyez-vous pas que c'est évidemment un piège? »

Je l'ignore, gardant toujours la tête penchée vers la limace aquatique géante.

«Si vous dites la vérité, vous laisserez-vous les autres humains traverser le pont en toute sécurité?»

«Que je le ferai.» Le limace dit avec un soupçon d'enthousiasme, il procède ensuite à changer de position et à replonger sous l'eau. Une grande queue de couleur violette ressemblant à une baleine battait juste avant sa disparition, la vague qui en résultait renversant le pont assez violemment.

Les agents étaient bien sûr hésitants lorsque je leur ai fait signe de traverser, je ne pensais pas nécessairement qu’ils étaient stupides à cet égard bien sûr. Tout cela s'était passé assez rapidement. Mais quelque chose en moi, quelque chose me disait qu'il disait la vérité et qu'il n'y avait pas beaucoup de raisons de douter de lui. Il aurait pu tous nous tuer maintenant s’il le voulait vraiment, mais il ne l’a pas fait.

Les agents sont hésitants, nerveux même. Lever les armes à chaque petit son émis, dire qu’ils étaient à bout était un euphémisme.

«Je n’aime pas ça. Je n'aime pas ça du tout. » L'un d'eux se plaint, accélérant son rythme à l'approche de la fin du pont.

"Tu peux le répéter." L'agent vers le noir ajoute, qui était par coïncidence aussi celui sur qui j'avais délibérément tiré pour lui faire lâcher son lance-grenades, donc ce n'était pas une surprise quand il m'a lancé un regard malveillant.

And, as we turn and start heading up the large, carved out, stone pathway and staircase to the front door of the mansion. I can feel him breathing down my neck. He really wasn’t happy with me. Oddly enough though, it was almost like I could hear him snickering about something

“Bella!” My radio crackles to life. Ted on the other end more furious than ever. “Am I hearing you shot at Agent Ben and made him lose his launcher? Do I need to come down there and-.”

I simply mute the radio. Yeah, it would mean an even bigger headache when I got back, but for now, I didn’t have the time to deal with the nonsense. Plus, Ted’s always been way too much of a control freak, so sometimes it’s nice to see him flip out on the rare occasions people defy him.

Nonetheless, we’re about halfway up the ridiculously long pathway to the front door when I feel something under my feet. Something moving around, it had intent, like it was digging its way up.

“Hey uh, you guys feel that right?” Lenard stops, he and I sharing a look of mutual understanding. But it dawned on me that the thing I felt below wasn’t anything natural, not that anything here really was.

“Pine People! Get ready!” I shout, realizing I had practically taken charge over the mission at this point.

We all stand back to back in a circular shape as they begin to dig their way up from the very ground at our feet. Dirt, minerals, grass, all of it going everywhere as they crawl out.

All of us start shooting simultaneously despite the fact no one had formally announced an open fire.

The eerie quiet that once dominated this area was now a loud repetition of gunfire and battle cries.

Dozens of them emerged from the ground, they didn’t have faces or any distinct features on them. Everything was simply their brown-colored skin, like that of tree bark, with pine needles jetting out along pretty much every inch, no eyes, no mouths, ears, or noses.

They were no bigger than a regular person, most of them just sitting at not any taller than six feet, but they were vicious. Violently aggressive and highly dangerous when they started to group together.

I empty two different magazines, calling for Lenard to cover me while I’m in the process of reloading. He tears up a line of them, bullets ripping right through their bodies like tissue paper, but they were admittedly difficult to shoot due to the unpredictability in their movements.

However, after one agent is in the process of reloading, a couple jumped onto him, animalistically punching, scratching, and hitting him with everything they have.

“Argh! Get off me!” He cries out in terror, I step in. Kicking two of them off and then blasting them both with a few bullets each. Luckily though, enough damage does seem to take them down. Especially headshots, which was the main thing I was going for.

We mow more down, one of them getting the chance to grab me before I could react, I turn, bashing him with the butt of my rifle and then following up by unloading six rounds into his head after he falls to the ground. That green blood they have spilling onto my boots and pants like a geyser had erupted.

“Is that all of them?” I ask before attempting to listen for anymore. Looking at our handiwork as the blood from all their corpses seeps down the steps towards the pond.

“I don’t see anymore,” Lenard responds while keeping his eyes trained elsewhere. “We should be okay for now.”

“Oh uh Bella, Ted wants you to turn your radio back on by the way.” Came the agent who had gotten pounced onto. Standing up and dusting off his gear.

“Ted can eat a shit sandwich.” I snarl. Now growing tired of even just hearing his name.

But I immediately do a one-eighty upon hearing rapid footsteps on the path. It’s one of the Pine People, not wanting to use up any more ammo though. I start walking down to take care of it with a melee attack when it suddenly slips on the blood of its dead relatives, tumbling down the steps of the path as it slams against them in awkward impacts.

It all comes to a stop however when the Pine Person ends up sliding far enough down the stairs and into the pond itself. It clearly can’t swim, desperately thrashing and splashing as it tries to remove itself from its current predicament.

Most unexpectedly, however, it is quickly being pulled under the water with no warning. Leaving only a small ripple where it once was. Well, that is until I saw some of its green blood float to the surface.

“Well would you look at that, Sluggy was really telling the truth,” Lenard smirks.

“He still killed Dave though.” Was the rebuttal of another agent. “I’m not just gonna forget about that.”

We continue moving up, taking proper care to reload our rifles and making sure we had enough ammo left to make it through the rest of this alive. I found myself concerned with the fact that I was running quite low. Prompting me to mentally kick myself for not thinking to bring more.

Once arriving at the supposed front door of the mansion, Lenard kicks it down.

The foyer was bare, no furniture or any sort of decoration. Just a stained white carpet and rotting white walls, again. This layout and design looked far too modern for it to be centuries old. Yet it was simultaneously long abandoned.

We split up, Lenard and I going to explore the west side of the mansion while the other three take to the east. I can hear footsteps coming from somewhere above us, but they are coordinated, calculated, and not like the Pine People’s. So I stay on high alert due to that very fact.

We march down a hall for a bit, I would expect to see some sort of furnishing, a chandelier, a painting, even some books or a coffee table. But no, there was none of that. It was barren beyond belief.

We get into the kitchen, the luxurious fridge residing within it hung open with the light off. Inside there is nothing but rot and rust, two of the shelves knocked over as well, both of them hanging haphazardly.

“None of this makes sense, can one thing about this place be consistent just once?” Lenard quizzes. “I feel like I’m in three different time periods here.”

“Believe me, the world is a crazy place,” I respond as we scope the area out for a few more minutes, but end up finding nothing that can really help us. So we opt to leave the kitchen and head down another hall instead.

It didn’t take long before Lenard and I come to a door that is slightly off its hinges. It’s rotting, most of the wood being scratched off. But It leads downstairs to what I assumed to be the basement. I wasn’t shocked when I saw that lights were on down there too. But I heard no activity. It was mainly the smell of rot and somehow wet dog that got to me as far as my senses went.

“Ladies first.” Lenard spouts sarcastically before proceeding to move down the stairs in front of me anyway. I follow, taking a quick few looks back to make sure no one or nothing was behind us.

I unmute my radio and switch the channel to speak to the other agents to let them know we’re descending.

“This is Agent Bella. Agent Lenard and I found the basement, heading down now.”

I wait for several seconds, there’s no response. No sound, no radio crackling. Just nothing, so I try again. And then again, still nothing.

“Lenard, try your radio,” I wave, flashing my own radio for punctuation.

“Hey, you idiots listening? We found the basement.” He follows up. “Come on you guys gotta let us know everything is alright.”

Once again, the same result and no response. So I do what I had been dreading for the past twenty minutes and switch back to Ted’s channel.

“This is Agent Bella, I’m here with Agent Lenard but the others aren’t responding, I repeat, the others are not responding.”

No response from Ted either, it dawned on us that something was wrong. Seriously wrong.

To make matters worse, Lenard turns and takes off running up the stairs, making a sharp turn and sprinting for the east side of the manor. All of this without warning mind you.

“Wait!” I shout behind him, tripping and falling on the stairs after trying to take off too fast. Lenard doesn’t even look back, I can hear him running along the hallway outside of the basement entrance. Leaving me in the dust as I try to get back up like a clumsy fool.

I finally get to my feet before grabbing my rifle and taking off, following the sounds of his footsteps. Between me falling over and him being a faster runner than me, to begin with, his head start was hard to catch up with.

The rest of the mansion was just as barren as the main foyer was, the hallways were admittedly tight, but even those had nine-foot-high ceilings. I pump my legs with everything I have, my breaths rapid and swift. Ignoring the sound of voices coming from multiple directions.

I feared the worst once I came to the end of the hall I was sprinting down and heard a quick burst of gunfire before it was suddenly cut off. Followed by a heavy smell of iron that had singed my nostrils.

I try to get on my radio one more time, but that futile effort quickly confirms my suspicion that something is blocking the signal and my communications are useless for the time being. Meaning I was now on my own now.

I follow the smell, a scent that had become far too recognizable. But this was my job, I know what had to be done. Not many things scared me like this, sent chills through my spine, or made my hands shaky.

“Lenard!” I call out while holding my rifle out in front of me. “Lenard! Where are you?”

Nothing but the cold silence of the halls says anything back. Well that, and the fact that I noticed a few drops of blood hitting the floor only a few feet in front of me.

I stop, the intensity of my breaths increasing as I hold my weapon. It’s not enough to make me feel safe anymore, not even close. Especially after I did what I wanted to do the least, looking up.

There was a railing, a railing that appeared to lead out from the second floor of the mansion. A railing that let anyone up there look down on the floor I was standing on.

But slumped over a section of the railing was one of the agents, the exact one… I wasn’t sure. Because the majority of his face was missing, save for about one eyeball and a quarter of his nose. But that wasn’t all, both his left and right arm had been torn away from the rest of his corpse, not to mention I saw about a good chunk of his side between his hip and his armpit had been mysteriously mutilated.

“God I-.” I stutter, my voice cracking pathetically despite my efforts to speak. To say something, anything.

The agent looked to have been mauled by a cryptid. I didn’t know what or how. More importantly, I don’t know how I didn’t hear it, surely I would’ve heard something, anything.

I wanted to get out of here, I wanted to turn and run. But I wasn’t a coward, I wouldn’t be able to live with myself if I just cut and ran away.
One of them still had to be alive, I couldn’t be the last one left. I held out hope I could save a life.

“Lenard!” I yell once more. “Lenard are you alive!”

I know something was there, and it was watching me. Huffing and puffing as I desperately try to get a hold on the situation, but it was far past that point now. Far beyond my control.

“It pains me to see such talent so wasted.” Came an unfamiliar man’s voice from behind, prompting me to snap around in an instant, my finger on the trigger and all.

There stood three figures in a triangular formation. The one in the middle a few feet closer to me than the other two. All three of which were dressed in black robes and or cloaks, hoods on, not allowing me to get an idea of their identities.

However, the one in the middle was more than a little bulky and muscular, his long hair in desperate need of trimming as it hung out from his hood. His beard wasn’t much better in that regard.

Another was more curvaceous, so I assumed it to be a woman. Not that it truly mattered, the three of them were creepy as all hell regardless.

The figure in the middle moves slightly forward, less than a few steps. But, it’s still enough to get a rise out of me.

“Not another step or I’ll blow your head off!” I growl, waving my finger over the trigger to sell my threat better.

The muscular middle man then reaches his hands up to the sides of his hood, gripping it lightly before slowly and dramatically pulling it back, revealing his identity to me.

I try not to react too strongly, wanting to maintain control and dominance over the situation.

“You’re him, aren’t you?” I growl, keeping the crosshairs of my scope on his forehead. “The one who murdered that creature’s mother and turned her on him.”

Ubel smiles, holding out his hand before clapping them together with a certain rhythm.

“Oh, Helena!” He calls out. Still keeping his gaze trained on me.

I hear it, something walking up behind me. Slowly, but its footsteps are heavy, heavy enough to shake the floor itself. As if it were an elephant walking along a tight rope.

“If she turns around or shoots at us, kill her,” Ubel commands the unseen entity behind me. It sounds unnaturally massive, growling like a dog, I can practically feel the warmth of its breath on the top of my head.

“You know I could just blow you all away right now!” I holler, raising my rifle slightly for dramatic effect.

“Oh, believe me, you aren’t faster than Helena, but you’re welcome to try and see how that plays out. You may be able to kill us, sure. But you won’t be able to kill Helena before she begins to tear your limbs from your torso and growl hungrily as you scream for the mercy of your own death to come and end your agony.”

I hear the thing behind me growl again, this time sounding much, and I much closer. Making me some type of fur on the back of my neck. One wrong move and I die a horrible, screaming, death. He was right, even if I do kill them, I’ll still perish painfully anyway. I needed to leave this place with answers.

“Why did you kill the slug’s mother?!”

Ubel steps closer, now knowing he has the ability to do so without me being able to back up my previous threat of blowing his brains out.

“Why do you bring that weapon with you when going on missions? To use it, to protect yourself, to let others know you are not to be messed with. Creatures like these are all over the globe, they are the greatest weapons we can possibly have. Not guns, missiles, or blades. Those are primitive in comparison to true power.”

“So you’re using them? You’re using cryptids? Making them your pets? Is that what this is?”

“Well… Anything sounds terrible with the right combination of words, they’re so amusing, aren’t they? Do you know who else is amusing? Your comrade Lenard.”

Ubel steps aside while holding his hand out in a presentative manner, along with the other two people in the robes.

Lenard then turns the corner, but not the Lenard I know. He was too far gone. His face had the stains of dried blood all over it, part of his upper lip torn off while his skin itself looked extremely pale. Zombie-like if you will, but the main thing was his eyes. They were gone, the eyeballs themselves anyway, but left behind were two red fleshy holes. Despite this though, he still looked over at me as if they were still there.

“What did you do to him!” I burst out violently. Unable to comprehend the gravity of the situation. I mainly wanted to know how they had turned him so fast, we had only been separated for around five minutes. That couldn’t possibly have been enough time.

After ignoring my outburst, he too smiles at me, well, it’s more of a smirk in all honesty. But still. Tilting his head to the left, glancing at Ubel.

“What shall I do to her master?” He says with his voice now heightened, as if it had been through heavy editing. But I know he’s gone, everything that made Lenard, Lenard, vanished. He was now under Ubel’s control. There was nothing I could do to save him.

“I adore your enthusiasm, but just you wait. Reinforcements will come soon, they’ve seen her communications have been cut off by now.” Ubel replies to the Undead Lenard.

“How do you know about that?” I interject.

“The Agency isn’t nearly as good at covering their tracks as they think, that’s why we sent a spy. A fake witness and you all believed him like the fools you are, he knew he would die, but was also aware it was worth it for our cause.”

It all clicked in my mind as he said it, every little detail. The witness had worn bright colors to sneak past the aquatic slug, he had no actual bruises or cuts because the Pine People never really attacked him. Because he was one of them, one of the guys in the black robes.

“You see.” Ubel goes on. “We’re trying to put together our most powerful creation yet, and we need five heads of women to do so. So far we have three, and I thought who would be better to add to the roster than Agent Isabella Davis herself. You’re intelligent, skilled, and useful. Usually, we would burn you alive first and then take your head, but I’m willing to be slightly more merciful with you because I’m impressed. You have to admit, my plan worked, I got you here, didn’t I? But don’t worry, we’ll be long gone before your armed friends show up to help you.”

“You’re gonna quickly find out I’m a lot harder to kill than I look.” I scowl.

“Regardless.” Ubel chuckles. “We have places to be, Helena, come!”

I feel something behind grab hard on the flamethrower strapped to my back, squeezing and applying pressure before it completely snaps and breaks, all the vital fluid inside spilling out.

Ubel and the two black robes turn to walk away, and I finally get a glimpse of the creature that was Helena.

She was a truly massive, humongous canine-like beast as the slug had said. Her height when standing on four legs approached eight feet, so she quite literally was nearly the size of an elephant. Her fur was a light shade of yellow while she possessed three eyes as well, all as black as the void of space itself.

But I still don’t dare shoot, not yet. Not with her right there, she would surely kill me before I could kill her. My head would be torn off my body before I could get more than a few bullets out of the barrel. Plus, I’m sure the other agents attempted to shoot Helena as well, seeing as I heard Lenard’s gunfire, but of course, they failed. I would most likely fare no better.

She elegantly walks along behind Ubel, but he stops for a second turning to the now undead Lenard.

“After you kill her, bring her head to The Chapel, and you’ll receive a reward. Helena and I have business elsewhere.”

And it’s only seconds afterward that they finally disappeared around the corner. Most likely taking a different way out of the mansion, which confused me, seen as the front entrance looked like the only possible way to get in or out on foot. But now that they were gone, the inevitable was going to take place.

Undead Lenard charges at me as I open fire, but his speed was completely unexpected. He dashes to the side inhumanly fast, a few of my bullets only hitting him in the side. Blood does come out, but this does not bother or slow him down pretty much at all.

He gets to me, yanking my rifle out of my hand and then crushing it with his newfound brute strength. So I quickly get my sidearm, but he grabs me by the throat, throwing off my aim before lifting me up into the air.

I’m able to wiggle around just enough before he can squeeze too hard on my throat, he loses his grip and ends up dropping me. With my pistol still in my hand, I turn and run back toward the front entrance of the manor, I don’t hear his footsteps. Instead, I hear the sound of a wall being crashed through.

“Come back! I need you for master!”

I pump my legs as hard as I can, turning the corner and laying eyes on the front door, escape just insight. So close yet so far.

But I’m stopped and thrown completely off my feet when Lenard comes smashing through the wall to my right, tackling me and sending both of us right through the front door wall.

I groan, a bit of blood running down my face as I try to get to my feet. But Lenard was much faster.

He’s far too strong to fight hand to hand, so I don’t even attempt it.
Undead Lenard leaps on top of me, wrapping both hands around my throat and beginning to choke me before I kick him as hard as I possibly could in the stomach.

It doesn’t cause him pain, but my foot and by extension leg, does end up going through his stomach and impaling him. Allowing me to push myself away after I yank my leg out of him. He was definitely strong, but also more fragile at the same time.

I grab my pistol and jump halfway down the stairs, sprinting with every ounce of power in my legs that I have left. I do get a decent headstart, but Lenard is hot on my tail.

“Come back!” He bellows. “I need you to come back!”

I get onto the bridge and begin to run across it, causing it to sway from side to side and send ripples through the water.
I nearly lose my balance several times, I can feel all the muscles in my body burning from everything I had endured up to this point.

I fire my pistol behind me in a futile attempt to slow Lenard down, but I myself don’t dare turn around, not even for a millisecond. Every moment was precious.

Once I’m at the opposite end of the bridge, I practically throw myself off of it. Sliding along the dirt and turning to fire some more shots at Lenard while he’s already covered more than half the distance. So I take aim with my pistol and start to pull the trigger for a headshot before he makes it across.

But he doesn’t make it, instead. The slug monster leaps up from beneath the surface and grabs Zombie Lenard in its jaws. Everything below his chest being engulfed by the creature’s mouth. Most of the bridge is destroyed in the process during this show of brutal spectacle.

“No!!!” Lenard screams, but once again. Not out of agony, it’s from frustrated distress instead. At least, I think that’s what it was. He had failed his objective and was reaching his arms forward at me. As if trying to get out of the slug monster’s hold, but it was no use.

The slug monster then shifts its body and dives back under, splashing a wave of water large enough to practically drench me.

I drop the pistol to my side, spitting up a little bit of the water that had got inside my mouth after I lean to the side.

“Yeah I’ve… I’ve had enough of tonight,” I say uneventfully, talking to myself as I stare up into the sky, the sound of a helicopter coming in the distance. Apparently, they didn’t wanna waste fuel giving us one the first time, but the reinforcements get one no problem. Figures.

Anyway, the reinforcements do arrive and clean everything up. I had told the slug monster to swim as deep as he could because they would kill him if they found him. I told the new team of agents that I had actually ended up killing the “thing in the water” so then they wouldn’t be tempted to bring him to the surface and kill Sluggy themselves.

Ted scolded me once I got back to Site Twelve. Going on and on about how I should be executed for the dumb decisions I had made, I’ll admit. I definitely messed up at some points, but he’s a meathead and wasn’t out there in the thick of it. He has no idea what it’s like being in the field.

There were no signs of Helena, Ubel, or those people in the robes from what I heard. Which made sense, they had made a pretty quick escape. But they said they would be tracking them. I informed them that Ubel had mentioned something about a chapel and told them the things they wanted to do to me.

As for Lenard, I told them the truth. Up until the point where he had been taken by the aquatic slug creature. I just said that I had blown the bridge with a couple of grenades and Undead Lenard had sunk, luckily they believed me.

Morons. They didn’t wanna retrieve his body for experimentation or anything like that, all they care about is that another cryptid had been destroyed. After which, they didn’t care too much about the mansion itself.

As for Sluggy himself, well… I paid him a visit on my own time a few weeks later, bringing him a bunch of raw meat that I had picked up from the grocery store.

“Hey uh- are you here!” I say, waving the grocery bags around. Gloves on as well, just to be on the safe side. I look around to make sure I’m alone, not wanting to not only jeopardize Sluggy but myself as well and get us both killed.

I wait for several seconds as Sluggy swims his way up to the surface. Getting closer to the edge of the ground right where the pond began, taking out some of the meat from the grocery bag.

Sluggy comes and breaches the surface much more calmly than all the previous times before, giving me an intrigued look with all eight of his chalk-white eyes.

“You… You returned.” He pronounces. Shocked at the revelation.

“I did, also brought you something, big guy,” I say holding up some of the meat and tossing it into the water, Sluggy quickly goes to town, scarfing it down like a child at breakfast.

“Ubel…” He begins after he finishes with his first portion. Prompting me to throw him another. “Is he truly gone?”

“It seems that way for now, but don’t worry my people are looking for him, and the wolf, the one that you said killed your mom. I’m really sorry about that.”

“I just wish I could make the both of them perish myself,” Sluggy said before swimming forward slightly to get his third filling.

“I know how you feel, my husband was killed, slaughtered like he was just some pig. I still get angry every time I think about it, but I promise you, Ubel will get his comeuppance.”

I then throw the rest of the meat into the water as I feel my phone ring in my pocket. Taking off my glove and retrieving the device as it continued ringing.

I take one look at the screen, it’s Ted. Immediately making my face sink low, my lips transforming into a frown. I look back at Sluggy as he finishes up his final helping of the meat.

“I uh… I’ve gotta go. If I keep ignoring the calls they’re gonna end up tracking my phone and I don’t want them knowing I’m here, for both of our sakes.”

I give Sluggy a wave, getting up and turning to walk away after putting my phone back into my pocket. But Sluggy calls out, stopping me as I’m about to enter the thick of the treeline.

“Thank you.” Is all he says, it’s much quieter, more intimate than his booming volume of words before.

“Of course.” I nod, turning around and smiling at the entity. “Make sure you take care of yourself, it’s a dangerous world out here.”

Sluggy doesn’t verbally respond, instead, arching his body and diving back down under the surface of the pond for the very last time. Barely even a splash as he disappeared into the abyss below.

Credit : mrmills45