Mi novio investigó un ruido extraño en Halloween

26 de oct Mi novio investigó un ruido extraño en Halloween

Siempre me ha encantado Halloween. Es una gran fiesta, es divertida y, sobre todo, me gusta tener miedo. Todos estos motivos hacen la Navidad para mí y mi familia. A mis padres les encanta tanto como a mí. Además de hacer trampa o tratar, vieron películas de terror conmigo y me llevaron a todas las atracciones locales embrujadas. Incluso cuando era niño, mis padres aún practicaban las mismas tradiciones con mi hermano pequeño Jamie. Y con mucho gusto me uní ... en su mayor parte.

Pero en algún momento, quería hacer algo diferente. Ahora tenía diecisiete años e iba a cumplir dieciocho en febrero. Mi último año fue abrumador y todavía era torpe. No tenía mucha experiencia en citas, no tenía buenos amigos. No hubo fiestas o noches de borrachos salvajes. Yo era Cassie Mercer. Su futura promoción importante. Y un completo nerd.

Supongo que era bonita. Incluso con anteojos y ansiedad, sabía que podía atraer a los hombres. Pero eso no parecía importar mucho en Stanwyck High. Era demasiado inteligente, demasiado diferente. Demasiado raro Todas las otras chicas se burlaron de mí. Los chicos nunca me prestaron atención. Todo lo que realmente podía hacer era buscar atención en línea. E incluso entonces, nunca tuve el descaro de conocer a alguien en persona.

Y así, la mayoría de mis Halloweens los pasé con mi familia. Quiero decir que no me quejo. Son geniales y aman las vacaciones tanto como yo. ¡Y Jamie es tan increíble! Incluso con la diferencia de diez años de edad, todavía estábamos muy unidos. Después de todo, mi soledad me ha dado mucho tiempo para cuidar niños. E hice lo mejor que pude para ser una hermana mayor grande. Además, ¡puede agradecerme por ponerlo horrorizado!

Pero básicamente, quería participar en esos Halloweens realmente salvajes y locos que había visto en las películas. Ya sabes, fiestas de disfraces, alcohol, placer ... ¡sexo! Entonces sí, no hay nada de malo en relajarse con mi familia cada Halloween. Tome a Jamie jugando, vea todas las decoraciones, disfrute de nuestros maratones de películas de terror. Es bueno pasar tiempo con ellos ... pero no todos los años. No cuando tenía diecisiete años y aún era virgen.

Y este año, Halloween iba a ser un viernes por la noche. Todos en la escuela tenían todas estas fiestas enfermas. Y no me han invitado a una sola puta. Qué sorpresa

Sin embargo, hubo una diferencia este año. Finalmente conseguí a alguien. Sí, Cassie Mercer finalmente consiguió un novio. Bien, solo hemos estado saliendo durante unos meses, ¡pero aún así! David era algo, hombre.

Se había mudado a Stanwyck durante el verano. Y una vez que lo vi, con mucho gusto me convertí en su compañero de estudio. Cuando nos conocimos, vio a través de mis lentes y mi frialdad. Me felicitó por mi belleza. ¡Y mencioné lo bonito que era! Sus brillantes ojos azules, esos largos cabellos castaños. ¡Incluso usamos ropa igualmente ridícula! Camisetas, jeans ajustados, artículos de segunda mano. ¡Y sí, le encantaban las películas de terror!

David incluso apoyó a mis padres y a Jamie. El realmente nos amaba. Independientemente de los ojos vigilantes de papá y los toques de queda de mamá, a David le encantaba estar con ellos.

Mis frustraciones solo vinieron del hecho de que no tuvimos tiempo para tener intimidad. Quiero decir, sí, nos separamos y hablamos de hacerlo por teléfono. Pero los padres de David rara vez me dejan venir. Bueno, ya sabes cómo eran mis padres. No nos dejarían fuera de su vista por más de unos segundos. Como dije, amo a mi familia hasta la muerte, pero podrían ser sobreprotectores. No es de extrañar que aún fuera virgen.

Pero este Halloween iba a ser diferente. Mis padres iban a jugar con Jamie como siempre. Solo que esta vez me quedé en casa. Al principio, me sorprendió que no cuestionaran mi decisión. Quizás darse cuenta de que su hija tenía diecisiete años los hizo calmarse por una vez. Además, sabían que David estaba ayudando a su padre con la tienda de segunda mano de su casa encantada. Trabajaría demasiado tarde para que él me visitara ... al menos, eso pensaban. Ya ves, David y yo teníamos este plan. Mamá y papá siempre se iban a las siete en punto. Y no volverían hasta la medianoche. Alrededor de las 7:30 a.m., David apareció en mi puerta como el caballero con una armadura brillante que era. ¡Y luego el sexo caliente de Halloween comenzaría de inmediato!

Odiaba mentirle a mis padres. Pero vamos, ¡fuimos la gran suerte de David y yo! Dos fanáticos de terror virgen en la noche de Halloween. ¡El momento fue demasiado perfecto!

Además, no es que no haya pasado las dos semanas anteriores celebrando las vacaciones con Jamie de todos modos. Habíamos visto Gritar la noche anterior, e incluso fui con él y la gente a la granja embrujada de Pope el sábado pasado. Entonces sí, podría permitirme compartir la alegría de Halloween con alguien que no sea él. Especialmente con David ...

Vivíamos en el campo, por lo que no habría trampas o juerguistas que nos interrumpieran. No hay distracciones que no sean un Maratón de películas de terror con tecnología de Netflix. Solo yo y mi amante solos en la casa.

Esta noche de Halloween, mis padres se mantuvieron ocupados ayudando a Jamie a prepararse. Este año fue Ghostface de Gritar. La máscara era un poco grande para él, pero en general, tenía un traje de culo. Al crecer, fui todo de Jason a Samara, así que estaba feliz de ver a Jamie continuar con la tradición familiar de los Mercer de disfrazarse de mierda aterradora.

Durante toda la noche, pude ver a Jamie preparando su bolsa de Jack-o-lantern para la acción. Papá creó la lista de reproducción de Halloween jams en su teléfono. Y mamá llena su taza de viaje con vino tinto.

Todos estaban muy emocionados. Y mientras estaba sentado en el sofá mirando Viernes 13 Parte VII: La sangre nuevaMe preguntaba si podría estar cometiendo un error al omitir el viaje.

Pero entonces mi teléfono vibró y vi este mensaje de texto de David: ¿Estás listo, bebé? 😉

Sí, no estaba cometiendo un error. A la mierda la regla de Randy de nunca tener sexo para sobrevivir a una película de terror. Esta noche me iba a la cama.

Le envié un mensaje de texto a David: están a punto de irse. Estar aquí a las 7:30 a.m.

Obtuve una respuesta rápida: 4, por supuesto.

Mi cuerpo estaba iluminado por la emoción. Vi la televisión justo a tiempo para ver a Jason empujando un timbre de fiesta en el ojo de una mujer. Buen momento

"¿Tienes tu cura para Halloween, Cassie?" Dijo una voz.

Sorprendido, salté hacia atrás y vi a mi padre entrar al pasillo.

Detrás de sus enormes anteojos, me sonríe. "¿Como estas?"

"Sí, estoy bien", le dije, recuperándome del miedo. Mi mirada se dirigió a mi teléfono mientras le enviaba otro mensaje a David: ven pronto, abucheo.

"Bueno, tu última oportunidad de venir con nosotros", dijo papá.

Miré por la ventana de una sala de estar. Aquí ni siquiera eran las siete en punto y nuestro patio delantero estaba envuelto en la oscuridad, aparte de las brillantes decoraciones de Halloween. Con los árboles como nuestros únicos vecinos, nuestra propiedad parecía una exhibición de la Granja Embrujada de Pope. Digamos que da un poco de miedo ...

Miré y vi a mamá conduciendo a Jamie a la habitación. "Está bien", dijo ella, confundida. Ella sostenía la bolsa de calabaza y la taza de viaje de Jamie.

Jamie luchó para evitar que su enorme máscara de Ghostface se deslizara hacia abajo. "¡Él no se quedará!"

"Lo tengo", le dijo mamá.

Divertido, la vi agacharse y colocar su vaso en el suelo. Con dedicación materna, ella rehizo su máscara, posicionándola a la perfección.

"Espera, chico", consoló papá Jamie.

Sonreí al verlo. Con esta enorme máscara, Jamie parecía una muñeca fantasma Funko-Pop.

"Estoy listo para irme", dijo Jamie.

En la sala de estar, todos parecíamos una congregación de culto de Halloween. Las decoraciones en nuestra casa no eran tan llamativas como las figuras y el falso cementerio de afuera, pero aún así eran impresionantes. Carteles de películas viejas, miembros de plástico cortados, una rata gigante y un fantasma mecánico que se dispararía cada vez que se escuchara un ruido fuerte. Las decoraciones acompañaron orgullosamente todas nuestras fotos familiares. Fue solo en Halloween y Navidad que mamá se atrevió a dejar que algo robara el centro de atención y las fotos enmarcadas de la escuela de Jamie.

Tazones de dulces conquistaron la mesa de café. Esta y una pizza Digiorno habían sido mi cena.

Mamá miraba Viernes 13 VII. Una muerte deslumbrante la hizo estremecerse. "Oh mi niño". Ella me miró, preocupada. "¿Estás seguro de que todo estará bien por ti mismo?"

"Sí", gemí. Una vibración me distrajo. Último mensaje de David: estaré allí pronto. Espera 4 yo

"¿Estás seguro de que no tienes demasiado miedo?"

"¡No mamá!" Dije mientras trabajaba en una respuesta.

"Está bien, no digas que no te lo advertimos".

"Ya lo has hecho". Le envié un mensaje de texto a David: ¡Será mejor que no llegues tarde! O sino.

Envolviendo su brazo alrededor de ella, papá besó a mamá en la mejilla. "Vamos, ella estará bien".

Con tonterías, Jamie levantó las manos. Su máscara se inclinó hacia un lado. "¿Todavía vamos?"

Riendo, papá enderezó la máscara de Jamie. "Sí, es hora de hacer un trato falso".

Los vi caminando hacia la entrada. Al escuchar a Jamie gritar de alegría y mi familia acercándose a la puerta principal, mi lado sentimental ganó.

Incluso cuando recibí otro mensaje de David, lo ignoré para seguir a mi familia. "¡Hey, espera!" Los llamé

Abrieron la puerta y la brisa fresca de octubre se extendió como una fuerza invasora.

En el porche, nos detuvimos al lado de un jack o'lantern. Ahí me despedí de mis padres y Jamie. Levanté la máscara de Ghostface de Jamie y le di un beso en la frente.

"Toma algunos dulces", le dije.

"¡Lo haré!" Fue su respuesta entusiasta. "¡Para mí y para ti!"

Sentí otro mensaje de texto en mi bolsillo, pero lo ignoré. Por ahora No iba a dejar ir a mi familia sin decirles que los amaba. Fue como una restricción para mí. Supongo que es hereditario.

(No tengas miedo) El segador gritó a través de la noche tranquila.

Mi mamá saltó, derramando un poco de su vino. Ella le dio a mi padre un ligero golpe, sonriendo. "Realmente!"

Papá silenció su teléfono. Ya había lanzado su lista de reproducción de Halloween. "Muy bien, son las siete en punto", dijo. Envolvió un brazo alrededor de Jamie.

Papá me dio un beso en la mejilla. "Te amo"

"Yo también te amo", le digo.

Mamá me abrazó. "Cierra la puerta". Ella me miró a los ojos como un policía autorizado. "Y por favor. Ten cuidado, Cassie.

"Me voy. Te amo".

"¡Vamos, vamos!", Jamie escuchó una llamada.

Sonriendo, mamá me dio otro abrazo rápido. "Llámenos si necesita algo!"

"Está bien", le digo. Sonriendo, la vi seguir a papá y a Jamie al SUV. Siempre nos costaba decir adiós. O tal vez simplemente no estábamos acostumbrados.

Después de que se fueron, volví a entrar. La casa estaba muy tranquila sin ellos. Todo lo que he escuchado es Viernes 13 el tema. Honestamente, esperaba ver a Jamie salir corriendo y asustarme Gritar atuendo.

Mi teléfono me envió de vuelta al presente. Lo revisé y vi una llamada telefónica de David.

Emocionado, respondí. "Hola, cariño", le dije.

"Hey, ¿qué pasa?" Escuché su voz sexy y profunda decir.

"Nada más." Regresé a la sala de estar. Justo a tiempo para ver la batalla entre Jason y Telekinetic Tina. "Solo te estoy esperando ..."

"Lo sé", dijo David, su voz incómoda. "Lamento llegar un poco tarde ..."

Gruñí. "¡Dijiste las siete y media!"

David suspiro. "Lo sé, bebé, pero papá me obligó a hacer una mierda aquí. I- "La estática y la inquietud lo rompieron. Como el sonido que escuchas en una transmisión de radio rota. El ruido blanco de un disc jockey.

"No puedo escucharte, bebé".

La estática se enderezó. Como si David hubiera saltado a un área más estable. "Mi culpa. Todos me están hablando. ¿Puedes oírme?"

"Sí".

"Dije que no podía pedirle ayuda a nadie hasta las ocho en punto".

Sacudí mi cabeza. ¿No podría su padre liberarlo? Era la jodida noche de Halloween ...

"Mira, estaré allí a las 8:30 am", trató de tranquilizarme.

Podía escuchar la sutil desesperación en su voz. "¿Las ocho y media?", Pregunté.

"¡Hasta luego!", Suplicó David. "Prometo."

"Volverán a medianoche". Todavía enojado, agarré el control remoto y accedí a Netflix. Mi cola estaba llena de películas de terror que habíamos planeado ver en algún momento. Específicamente, se suponía que debíamos estar mirando Halloween: la maldición de Michael Myers y H2O esta noche. Dos de mis favoritos personales.

Al otro lado, escuché el cansado suspiro de David. "Lo sé, bebé", dijo, disculpándose. "Te atraparé".

No pude evitar sonreír. A pesar de todo su lado sexy, su lado sensible era bastante lindo. "Hmm, ¿quieres ahora?"

"Sí", dijo con una risita astuta. "Voy a apresurarme allí y tomar mi tiempo contigo".

El frío aire de octubre derritió mi carne hormigueante. Estaba haciendo calor. "No lo haré", respondí, manteniendo mi voz firme. "Tan pronto como llegas aquí, salto sobre tu sexy trasero". Solté un gruñido simulado.

David se ríe. "Puedes saltar sobre lo que quieras, Cassie".

Una radiante sonrisa invadió mi rostro. "¿Entonces quieres que guarde Curse para ti?"

"No, ve y comienza sin mí. Estaré allí pronto ".

"Muy bien." Me caí jugando en maldecir. "Pero será mejor que vengas aquí".

Y luego escuché la extraña estática de nuevo. La voz de David se quebró. Su voz profunda sonaba como un monstruo distorsionado.

Acerqué el teléfono a mi oído. "¡Bebé, no puedo escucharte! ¿Dónde estás?"

Después de unos segundos, la recepción mejoró. Escuché voces y gritos en el fondo. Pensé que la casa embrujada de su padre estaba saltando en esta ciudad estadounidense. Demonios, mamá y papá probablemente se dirigían en esa dirección en este momento.

"Todavía estoy en la tienda", finalmente escuché a David decir.

"¿Te ves ocupado?"

"Sí, ¡pero estaré allí a las ocho y media!", Prometió David. "Te amo!"

"¡Yo también te amo!"

"Déjame enviarte un mensaje de texto". Escuché una fuerte voz masculina gritarle a David. "Papá me está llamando. Te amo bebe "

Cuando escuché a David bajar el teléfono, pude escuchar más ruido y gritos. Los fuertes pasos de David brillaron hacia mis oídos. Incluso me pareció oír a un niño gritar. Y luego David colgó.

Con una sonrisa maliciosa, bajé el teléfono. Este lugar debe haber sido un manicomio.

Miré a la pantalla plana. Michael Myers acababa de pellizcar a un médico en una punta afilada.

Mejor dejaron ir a David, pensé. Estos bromistas pueden dejar que alguien más los asuste. David era mio.

Determinado, le envié a David un nuevo mensaje: 830, bebé.

Me recosté en el sofá. Armado con mi maíz dulce, me preparé para ver a Michael Myers hackear más hijos de puta.

Noventa minutos después, llegué al confuso final de la película. Aquí eran casi las nueve y David todavía no estaba allí. Michael había matado a más de diez personas en el mismo período. Sin embargo, David no se había quedado sin trabajo y había hecho los quince viajes para verme. Sabía que se preocupaba por mí, pero aún así ... ¿cuál fue el atraco, amigo?

Mientras se reproducían los créditos finales, revisé mis mensajes. Por supuesto, David se había mantenido en contacto. Me había enviado todo lo que solía haber hecho, dame unos minutos más, te amo cariño, etc. También había hecho una exploración lenta, prometiendo estar aquí a las 8:30 a.m. a 8:35 a.m. a las 8:45 a.m. a 9 a.m. último mensaje: Estaré allí pronto.

Maldición, ni siquiera podía darme un número ahora.

También estaba preocupado porque mamá y papá no habían respondido a mis mensajes de texto. Pensé que estaban ocupados. Después de todo, Jamie en la noche de Halloween podría ser un puñado. Además, tenía esta enorme máscara que tenía que enderezarse constantemente. Mamá también estaba probablemente borracha ahora. Y papá estaba ocupado con su lista de reproducción épica. Oh, bueno ... al menos sabía que podría tener más tiempo con David cuando finalmente llegara.

La pantalla plana volvió a mi cola. Y con el aterrador puntaje de John Carpenter terminado por el momento, solo escuché el silencio. Al principio me sentí solo. Aquí era otra noche de Halloween y no había fiestas para Cassie. No sexo Y había comido más de veinte trozos de maíz dulce ... ugh. Si me hubiera ido con mamá y papá, al menos no me gustaría cagar. Me divertiría con ellos.

Agarrando mi teléfono, miré por la ventana. Nada más que oscuridad se escondía afuera. Sin faros. No hay señales de mi caballero con una armadura brillante. Estaba solo aquí en el país.

Miré nuestras decoraciones. Ahora se transforman de lindo y original a aterrador. El fantasma flotante me miró como una estatua imponente. Todos los ojos de las figuras parecían seguirme como si fueran imágenes embrujadas. Estaba atrapado en este museo de Halloween. Y las exposiciones parecían listas para hacerse cargo. El miedo ha superado mi soledad. Necesitaba una bienvenida distracción del aislamiento.

Justo antes de que puedas jugar H2O, Escuché un leve ruido romper el silencio. O ruidos leves, debo decir. Escuché latidos y movimientos.

Incómodo, me levanté y escuché atentamente. Los ruidos seguían siendo débiles y débiles, pero podía escucharlos. Escuché un leve ruido de deslizamiento. Como si una caja fuera empujada al suelo. También me pareció escuchar un susurro. Y todo vino detrás de mí. Como si alguien viviera en las paredes.

Joder! Pensé Miré por el pasillo. Los ruidos pueden haber sido débiles, pero podría encontrarlos allí. Nuestra puerta del sótano era la puerta más cercana a la sala de estar.

Con pasos cuidadosos, me acerqué. A través del silencio ensordecedor, escuché estos ruidos. Podía escuchar un leve rasguño ... ¿tal vez era un mouse?

Cuando me detuve en la puerta, no pude escuchar nada. No más mezclas o susurros. Pero eso no alivió mi miedo. Mis ojos asustados miraron la gran puerta de madera como si fuera una puerta de entrada al infierno. Me obligué a alcanzar el botón.

Una vibración repentina me hizo retroceder.

"¡Joder!" Grité. Miré mi teléfono zumbido. David estaba llamando. Y de repente, todo el miedo tenso que sentía se desvaneció. Su llamada también podría ser un coche de policía que se ha detenido. Mi emoción regresó.

Sonriendo, respondí. "Hola, ¿dónde estás?"

"Me detuve", su voz fría y profunda me calmó. Ooh, esa voz ... No podía esperar para escucharla mientras estábamos haciendo otra cosa.

Ansioso, me dirigí a la entrada. "Está bien, te veré en frente". No quería parecer demasiado mareado, pero mierda, estuve esperando toda la noche. Toda la escuela secundaria en otro lugar.

"Dulce". De cualquier manera, David hizo esta respuesta en una palabra encantadora. Pensé que estaba ocultando su entusiasmo como yo. Pero los dos sabíamos que queríamos lo mismo.

Colgué y abrí la puerta principal. No pude evitar sonreír.

David se destacó en el porche delantero. Llevaba un uniforme de mecánico manchado de sangre, su bonita cara oculta por una máscara de hombre lobo.

Mi risa resonó en la fría noche.

Fingiendo estar confundido, David levantó sus manos enguantadas. "¿Qué? ¿No puedo asustarte?"

Me acerqué a él. "Ven aquí", le dije. Con autoridad, tiré de su culo sexy.

En la sala de estar, David reveló una botella de vino que había escondido detrás de su espalda. El alcohol era más elegante que la mayoría de los baratos que había visto beber a mis compañeros de clase cuando me metí en su Facebook.

Lo agarré, impresionado. "Nada mal."

David se quitó la máscara. "Sí, se lo robé a papá".

El sudor goteaba de la máscara. Demonios, todo estaba en la cara de David desde otro lado. Incluso con el clima frío, David parecía que estaba corriendo una maratón. Nuevamente, perseguir a los niños no era broma.

Riendo, sentí en su pecho. "Puedo decir que has trabajado duro".

"Sí". Se limpió el sudor de la frente. "Lamento llegar tarde. Este maldito papá me hizo correr".

"No, estás bien". Sentí a lo largo de las manchas de sangre falsas del uniforme. Especialmente aquellos que cubren su entrepierna y culo. "Bonito disfraz".

Con una sonrisa maliciosa, David tomó mis manos. "¿Tienes una toalla?"

"Sí". Puse el vino en la mesa de café.

"Estábamos tan jodidos". David se quitó los guantes, revelando las palmas húmedas. Los guantes salpicados de rojo gotearon más sudor que los de un jugador de fútbol.

Me puse el teléfono en el bolsillo camino a David.

Me hizo esa sonrisa sexy. "Lo siento, estoy sudando".

Envolví mis brazos alrededor de él. "Como estas." Atractivo, le acaricié la cara. "Vamos a sudar de todos modos".

David se rio entre dientes. "Claro." Me dio un dulce beso. Incluso con sudor y manchas de sangre, no me importa. Este disfraz saldría pronto.

"No le tengo miedo al lobo feroz", bromeé.

Juguetón, David gritó.

Me rei Estaba perdido en sus ojos brillantes y penetrantes. Y este cuerpo ...

Levantando los guantes y la máscara de hombre lobo, David se alejó de mí. "Déjame configurarlos muy rápido".

"Límpiate, sexy". Me quedé allí y admiré este botín mientras se dirigía al baño. Mi gran sonrisa no pudo ser eliminada. No había estado tan emocionado desde que vi Él noche de estreno

Momentos después y estábamos allí. David y yo en el sofá. Copas de vino en nuestras manos. Las luces se apagaron. H2O en la televisión hablando de mi tipo de velada romántica.

Nos lo pasamos genial en la próxima hora. Riendo Tomados de la mano. Tener miedo H2O & # 39; s mejores escenas

Con todo el placer, había perdido la noción de mis padres. Nunca me molesté en revisar mi teléfono para ver si me habían llamado o enviado un mensaje de texto. Estaba demasiado preocupado por mi abucheo. Y sabía que todavía teníamos varias horas juntos ...

Empezamos a salir. Podría decir que fue incómodo. Nunca lo sabré cómo logré intimidar a un bombón. Entonces, por una vez, tomé el asunto en mis propias manos. Tal vez el alcohol me hizo valiente, no lo sé y no me importa. Todo lo que sé es que fui coaccionado por mi novio sexy.

Dibujé a David para el beso feroz pero seductor. Y a partir de ahí, nos fuimos ...

Había despertado una bestia en cada uno de nosotros. Serenándome con besos, David lo sintió por todo mi cuerpo. Gemí cuando puse mi vaso sobre la mesa, derramando un poco de alcohol. Después de todo, también quería sentirme por él.

la de Halloween el tema se jugó cuando nuestra sesión de maquillaje se calentó. Impulsado por una sexualidad desatada, aparté a David y salté encima de él.

Pude ver en los ojos de David que estaba impresionado e incluso nervioso. También sabía que él era virgen, ¿entonces tal vez yo era demasiado extra? ¡Pero mierda, como me importaba!

"¿Te gusta?" Susurré en mi mejor intento en un tono sensual.

A juzgar por la ardiente mirada de David, mi intento debe haber sido bastante cálido. "Oh, sí bebé".

Me sentí a lo largo de su "disfraz". Hasta su bulto. Me acerqué a esta cara bonita. "Es hora de quitarse el uniforme, hombre lobo".

"Adelante".

Con manos frenéticas, busqué su cinturón o la cremallera o lo que sea. Gruñí. ¿Por qué demonios era su traje tan complicado?

David se ríe. "Lo tengo", comenzó a desabotonarse la camisa.

Justo antes de que David pudiera revelar el cuerpo sexy debajo de la ropa fea, la mezcla que escuché antes hizo eco una vez más. Escuché los mismos gemidos amortiguados. Los mismos ruidos deslizantes. Incluso unos pocos pasos vagos.

Sorprendido, miré la puerta del sótano. Incluso con la banda sonora de la película, pude escuchar estos ruidos. Rompieron la intimidad con una brutalidad más repentina que la que mis padres podrían haber tenido.

David me miró confundido. "Cassie, ¿qué pasa?"

Miré al sótano mientras los sonidos persistían. Se estaban volviendo más fuertes. "¿Escuchaste eso?" Le pregunté, con los ojos en el pasillo.

"No escucho mierda". David se inclinó y siguió mi mirada. "¿Qué es esto?"

Intentando concentrarme, la silencié.

Por el rabillo del ojo, noté que sacudía la cabeza con frustración.

Pero no me importa Algo hizo ruidos extraños en mi sótano. Y no era solo un ratón. Al escuchar con más atención, pensé que escuché más cajas colapsándose allí.

Incluso con mi propio novio a mi lado, me sentí incómodo. La pura alegría de la noche se había sumergido en una atmósfera de incomodidad persistente.

David me agarró del brazo. "Bebé."

"¡Aguanta!" Me alejé de él y me atraganté H2O.

"¿Qué estás haciendo?", Preguntó un David agitado.

Frente a él, señalé el pasillo. Hacia el sótano. "¡Escucha!"

Los ruidos eran muy fuertes. Sabía que tenía que escucharlos. La mierda era un coro de susurros. ¿Quién estaba por ahí ... o qué carajo por allá?

Escuché gemidos. Los pasos dispersos. El deslizamiento Creí escuchar patadas y mierdas. Parecía que alguien estaba haciendo estos ruidos a propósito. Como si alguien estuviera tratando de provocarnos a ir allí ...

También vi terror golpeando la cara de David. Su sonrisa sexy y el brillo en sus ojos se evaporaron justo en frente de mí.

"¡Maldita mierda!" Dijo con voz temblorosa.

"Lo escuché antes".

David se levantó y caminó por el pasillo.

¡Ahora qué demonios estaba haciendo! Me levanté y lo perseguí. "David!"

Incluso con los ruidos inquietantes que giraban a nuestro alrededor, David entró en el pasillo. No sé lo que estaba pensando. El era un niño bonito. No es un rudo.

"¡David, espera!", Supliqué. Lo detuve en el pasillo. Justo en frente de la puerta del sótano. "Joder, para".

Detrás de esta puerta, escuché el piso de madera del sótano crujir.

David me arrancó el brazo. "¡Solo voy a comprobar!"

"Eres malditamente estúpido!"

Divertido por mi creciente paranoia, me dio esa sonrisa maliciosa. "¿Qué?"

Lo empujé lejos. "¡No vayas allí!"

Todavía sonriendo, acarició mis hombros. "Mira, Cassie, solo voy a verificar, está bien".

"¡No, David! ¡Es completamente loco! "

"Mira, esto probablemente no sea nada, está bien". Se acercó a H2O & # 39; s Chase escena jugando en la pantalla plana. "Todas estas películas de miedo te preocupan, bebé".

Molesto, extendí sus manos. "¡Y ustedes actúan como idiotas que son asesinados!"

En el calor de nuestra primera pelea, me di cuenta de que los ruidos se habían detenido. Pero todavía no quería que David fuera allí. Especialmente cuando me dejo solo.

Como el novio relajante que era, David extendió sus manos hacia mí, dándome mi espacio. Como un asesor tranquilizador. "Mira, estas son solo películas, bebé".

Evité enfrentarlo. Pensar que un fanático apasionado de las películas de terror como yo estaba a punto de hacer algo tan estúpido ...

"Je veux dire que ce n’est probablement rien", a poursuivi David. "Laisse-moi juste vérifier, et je reviendrai."

Retenant des larmes effrayées, j'ai affronté la porte du sous-sol.

"Je n'entends même plus rien maintenant", ai-je entendu la voix calme de David me dire.

Mais cela ne m'a pas réconforté.

«Laisse-moi partir avec toi», suppliai-je. J'ai fait face à David, ma bizarrerie remplacée par un sérieux sévère. Le même regard que j'avais lorsque je l'ai instruit à la bibliothèque ou aidé sur ses papiers. "S'il te plait, David."

David hésita. "Bébé, reste juste ici."

"Mais vous avez dit que c'était sûr-"

Je sentis sa forte prise serrer mon épaule. Une prise solide mais solidaire. "C'est sûr. Je veux juste être sûr. "

Ses yeux d'un bleu éclatant m'ont toujours convaincu. J'ai réalisé que David essayait juste de me protéger. Il s'en souciait.

Et j'ai donc cédé. J'ai laissé mon boo descendre tout seul dans le sous-sol. Mais pas avant de lui avoir remis le couteau de boucher de ma mère. Pas question que je le laisse descendre les mains vides. Comme il l’a dit, j’avais vu trop de films.

David ouvrit la porte du sous-sol et descendit les marches grinçantes.

Il y avait une faible lumière au bas des escaliers. Mais je ne pouvais pas voir de merde d'où je me tenais. Tout ce que je pouvais faire, c'était regarder David descendre dans cette crypte d'une cave.

«Je t'aime», lui ai-je crié.

David se tourna et me fit un sourire rassurant. "Je t'aime aussi bébé."

Et avec cela, il a disparu de la vue.

J'ai attendu quelques instants tendus. Que ce soit lui qui pleurait pour obtenir de l'aide, ces bruits mystérieux, ou même David qui hurlait simplement que tout allait bien, je voulais entendre quelque chose. Mais je n'ai rien. Juste le silence troublant d'une nuit d'Halloween.

Je devais retirer mon esprit de l'effroi. Je me retournai H2O. Même en mode muet, les scènes étranges du film n’ont pas aidé. Tout comme la façon dont entendre les bruits m'a distrait de David se déshabillant, même le vin ne me tentait pas à ce stade. Quelle nuit… et je savais qu'au moment où cette merde serait réglée, maman et papa seraient à la maison.

En pensant à ma famille, j'ai vu mon téléphone posé sur la table basse. Je l'ai arraché. Pour une fois, cela ne me dérangerait pas un appel intrusif de leur part en ce moment. Juste pour entendre leurs voix. Tout pour me distraire de cette putain de longue et angoissante attente.

Accroché à ma cellule, je titubai vers la porte du sous-sol. Mes pas sont lents et prudents. J'ai écouté n'importe quoi. Tout signe de David. Le silence était si assourdissant. Sans parler de douloureux.

Je m'arrêtai à quelques centimètres de la porte ouverte. Essayant de contrôler mes nerfs, je pris une profonde inspiration. J'ai regardé mon téléphone. Il n'y avait toujours pas d'appels ou de SMS des loyers.

J'ai regardé en arrière au sous-sol. "David," dis-je à haute voix.

Rien. Pas de bruits étranges et aucune réponse de David. Si ce baiseur allait me faire peur, je romprais avec son cul tout de suite. Peut-être qu'après avoir fait l'amour…

Paniqué, j'ai commencé à faire défiler mes appels récents. Naturellement, le nom de papa était juste au sommet.

Avant de pouvoir écraser le cadran, j'ai entendu une étagère basculer au sous-sol.

À l'impact, le son a envoyé notre fantôme mécanique dans une frénésie. Avec une vitesse sur pilotis, il flottait d'avant en arrière dans un coin salon. Ses gémissements effrayants résonnaient dans la maison comme les cris d'un détenu tourmenté. Les yeux rouges du fantôme brillaient d'un mal détaché.

Surpris, je reculai contre un mur du couloir. J'ai verrouillé les yeux avec le fantôme pendant un bref moment étrange. Leurs reflets peints semblaient me marquer. Et puis juste comme ça, le fantôme s'est arrêté soudainement.

Terrifié, j'ai regardé les escaliers du sous-sol. "David!"

Il n'y a toujours pas eu de réponse. Juste le silence inquiétant. Je savais maintenant ce que je devais faire.

Je suis allé de l'avant et j'ai pris un autre couteau dans la cuisine. Ensuite, j'ai appelé papa. Avec sa voix au téléphone, j'ai pensé que je pouvais gérer tout ce qui se cachait dans le sous-sol. Après tout, je ne laissais pas David là-bas. Pas seul. Il avait besoin de moi.

Alors que l'appel sonnait et sonnait, je me précipitai dans l'escalier. «David!» Ai-je crié. Des pensées inquiètes me traversèrent l'esprit. Et s'il était blessé? Et si ce qui avait fait ces bruits l'attaquait? J'espérais juste que je pourrais avoir David alors nous ferions sortir l'Enfer de là! Papa pourrait appeler la police.

Mais mon appel a continué à sonner. Plus de malaise m'a frappé. Papa ne répondait pas. Enfer, il était déjà onze heures. La tromperie n'a jamais duré aussi longtemps, même un vendredi.

Et puis j'ai entendu de la musique. Musique rock au sous-sol. À chaque pas que j'ai fait, la chanson rock n'a fait que devenir plus forte.

Tremblant, j'atteignis le sous-sol. Je pouvais entendre la musique en fouillant la petite pièce. La seule ampoule balançoire du sous-sol n'a pas beaucoup aidé. Tout ce que je pouvais voir, c'était les débris de toute la merde qui était tombée. Toutes les étagères et boîtes.

Nos décorations de Noël étaient éparpillées partout.

J'ai reconnu l'air. (N'ayez pas peur) The Reaper. Mais il ne jouait pas avec une chaîne stéréo ou des haut-parleurs impressionnants. Blue Oyster Cult sonnait comme s'ils étaient relégués à la musique de fond.

Une faible lueur dans un coin de la pièce attira mon attention. La lueur se déplaçait très légèrement le long du sol. Le choeur obsédant de Reaper dériva du minuscule haut-parleur de l'appareil.

L'horreur qui s'était accumulée en moi atteignait maintenant un violent crescendo.

J'ai baissé mon téléphone portable et mis fin à ma tentative d'appeler papa. Je savais que ce n'était pas nécessaire. Il n'allait pas répondre. Pas quand il n'entendait pas son (N'ayez pas peur) The Reaper sonnerie.

Dans le coin, l'appareil a cessé de briller et de bouger. La brève performance de Blue Oyster Cult était terminée. Et je me suis rendu compte maintenant que le téléphone portable de mon père avait été là tout le temps.

"Oh, mon Dieu ..." m'écriai-je. Les larmes jaillissant, je me précipitai vers le téléphone portable de mon père.

J'ai entendu mes pieds éclabousser le sol. I could feel a slimy substance stick to my shoes like gum.

Desperate, I tried to keep going. A few feet away from the phone, I almost slipped until I balanced myself against a shelf. Had shit started leaking in here?

I flashed my phone’s light toward the ground. Through the fear running in my veins, I could make out that it wasn’t water I’d been slipping on. Just a huge river of blood. Or better yet, a red lake.

Crying, I forced myself to pick up dad’s phone. I mashed the home button. There on his background was a photo of us. Me, mom, dad, and Jamie. A picture of Jamie’s costume trial run from last night. We were all smiling. Even with the oversized mask slouching down, Jamie wore his Ghostface costume with pride.

But what caught my eye were the red stains scattered across the screen. Horrified, I tried to wipe off the blood, but it only smeared across our faces like finger paint. I’d given the picture a grisly filter.

Too scared to scream, my eyes shifted around the basement. I didn’t see anyone. Just an open back window.

The steady breeze from outside swept against me, but it didn’t give me chills. I was already shivering with terror at this point.

“David!” I yelled. I took a step back and lost my balance. “Oh, God!”

Dropping my dad’s phone, I fell against a bookcase. I felt the cheap wooden structure rattle in my grasp. Dozens of old children’s books splashed into the blood below.

I saw their pages open up. Dozens of those illustrations suffered the same crimson filter my dad’s background photo had. The Berenstein Bears y Winnie The Pooh Halloween images looked so much scarier now than they ever did to me or Jamie. My childhood literature had been morphed into blood-soaked nightmares.

Wiping away my tears, I looked over and saw what I’d tripped over. Then all my tears came roaring back.

That wasn’t a box or shelf I’d stumbled into. It was my dad. He was bound-and-gagged in duct tape. His clothes bloodied and littered with numerous stab wounds. His eyes forever open in fear. His throat slit and still leaking more crimson for the basement’s blood drive.

Messy footprints were right below his feet. The spots where his feet had kicked around in terrified desperation.

Dad’s dead eyes looked right at me. As if me bumping into him had given him brief life. Brief hope that I could save him.

“Oh God! Dad!” I cried. I leaned down toward dad. And then, under the dim lightbulb, I saw mom lying right next to him. She was bound-and-gagged as well. Her clothes drenched in blood. Her face sliced and hacked beyond belief. As if whoever did this attempted to give her an impromptu facelift… and they’d almost succeeded.

Her splattered footprints in the blood could also be seen. Like my dad, she’d attempted to stand and escape.

I felt nausea accompany my immense sadness. “Mom!” I yelled through the avalanche of tears.

Turning away, I locked eyes with the most terrifying sight of all.

Jamie wasn’t spared. Still wearing the Ghostface costume, he too was tied up in duct tape. Even on his dark clothing, I could see red spots on his deep gashes and his costume’s torn cloth. A giant circle of blood surrounded his heart. His fatal wound.

His mask was gone, showing me my brother’s dead face in all its horrific glory. Thankfully, his eyes were closed. His pale face reminiscent of a young Angel lying on his deathbed.

I tried to avoid looking at the gut-wrenching scene. But there was no way. Dad, mom, and Jamie’s corpses surrounded me like a family plot.

Sobbing, I covered my eyes. “No…” I whimpered. “I’m sorry…”

Then I heard footsteps right behind me. Not the noises from earlier. These were loud, confident footsteps.

I whirled around.

David emerged from behind the bookshelf. That sly, sexy smile on his face.

“Happy Halloween, Cassie,” he told me in his deep voice.

I just stared at him. How could my boyfriend be smiling right now? My eyes ran up and down his body. Even more bloodstains were now on his uniform. Fresher stains.

Smirking, he strutted up to me. The butcher knife dangled from his hand. Blood covered the knife’s sharp edge like decorative paint.

“You look scared, Cass,” he teased.

I staggered back, terrified.

With a cryptic smile I used to find so sexy, David followed me. Each one of his methodical steps splashed through the pool of blood. But he didn’t care. He only had eyes for me. “It’s okay, babe,” he said in a mocking sensitive tone. His deep voice was no longer arousing, it was eerie. The voice of an apathetic psychopath.

He cornered me against the wall.

More confident than he ever was on our date nights, David stopped right in front of me. “On Halloween, everyone’s entitled to one good scare.”

“David,” I pleaded. “Don’t fucking do this!”

Chuckling, David put the knife to my face. The moist blood slid along my skin. The blood a disgusting barrier between my flesh and the sharp blade. “It’s our Halloween, remember?”

And then he slid on a mask he had pulled back the entire time.

I looked on at the iconic Ghostface mask. Jamie’s mask. And for the first time since I was a child, that fucking mask terrified me. And unlike with Jamie, the mask was a perfect fit on David.

Trembling in fear, I realized David had killed them all. He brought them here. I don’t know how, and I don’t know exactly when… but all along, those strange noises were coming from my helpless family. Just like how those bloodstains that were on David’s uniform had come from them.

David let out a ferocious battle cry as he pulled the knife back to finish off the last Mercer.

I glared at that Ghostface mask. The one Jamie was so excited to wear. In this shit lighting, David actually did resemble a ghost. All I could see was the pure white face. And the blood-stained blade that came hurtling at me.

I’d seen scary movies all my life. I knew what this Final Girl had to do.

Before the knife could strike me, I ducked and kneed David where it hurts. One swift blow to the crotch.

Crying out, David staggered back. Like the clumsy killers in Scream, he too was human.

For a moment there, I stood stunned by my own clever ingenuity. Thirty minutes earlier, I figured I’d be doing all kinds of things to David’s crotch… but certainly not kneeing it. My God, the irony. I was the Final Girl.

I watched David lean against a shelf and recover. He raised the knife once more.

Unlike those Final Girls, I had no movie to pad the runtime for. I wasn’t gonna let this villain recover time and time again. Nor was I gonna run away.

Using my huge iPhone, I came charging in and slammed the device straight into that fucking mask.

I heard David yell out in pain. His hands flailed about wildly, dropping his knife to the sticky floor.

My next hit sent him on his ass. Right into my literal bloodlines. He collapsed into the blood like he’d fallen into a fountain.

Mais je ne me suis pas arrêté là. My dad had always hated how big my iPhone Xs was. He just never realized it made for a solid weapon.

With it, I beat the Hell out of David. With even more fire and vigor than I’d planned to use on our Halloween sex.

He kept screaming in agony. Nothing pleasurable about it.

“Fuck you!” I hurled at him. I threw the phone down next to his quivering, beaten body.

“Cassie,” I heard him stumble out, his deep voice down to a low tremble. “Please, don’t…”

Leaning down, I scooped up the knife.

Out the corner of my eye, I saw David sit up. More blood coated his uniform. “Cassie, look just listen-“

I plunged the knife into the mask’s gaping mouth, silencing him forever. All my pent-up sexual hysteria had powered that one thrust.

David collapsed into the blood. His body completely still. The butcher knife stuck straight out of the mask like a victory banner.

After completing my vengeance, the tears returned. I cowered in a corner and wept. With blood-stained hands, I covered my face. I couldn’t look at the massacre. Not at the grotesque remnants of my family.

The police arrived soon after and took David’s corpse away. I told them everything. Well, except for how I’d overpowered him…

It turned out David had started losing it over the past month. He had a Halloween fantasy built up in his fucked-up mind. He even killed several people in the “haunted house” before tracking my family down. The police wanted to blame horror movies, but I was quick to call bullshit. They asked me why. All I said was just look at me. I wasn’t a psychopath lunatic.

People try to tell me it was a Godsend or I was lucky that I didn’t go with my family that night. They believe David would’ve gotten me with them, and then he would’ve killed us all. But what did it matter? I could’ve saved them. I had my chances after all.

As the police escorted me out the basement, I stole one last look at the crime scene. I noticed all the fallen boxes and my parents’ messy smorgasbord of footsteps. They were the ones who’d been making the noises I heard throughout the night. Had I gone down there earlier, I could’ve saved them. I could’ve helped them before I sent my boyfriend down to investigate those strange noises. And with a horror that haunts me to this day, I know I inadvertently sent him down there to finish the job. I even gave him the knife.

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Credit: Rhonnie Fordham (Facebook • Patreon • Reddit)